A partir de haber hablado con una compañera de trabajo y amiga decidí ir a la consulta de D. Ismael. Esta amiga de la que hablo en esos momentos estaba estudiando Osteopatía y Homeopatía y me aconsejó que lo visitara, yo nunca había oído hablar de esto y inicialmente me causó al decir verdad incertidumbre y dudas.

Pero lejos de todo ello, cuando conocí a los profesionales que me trataron me convencí de la seriedad y rigor de los tratamientos que realizaban. Siguiendo con mi problema cervical, habría que añadir los problemas que me producía para poder dormir. En la medida en que iba acudiendo a la visita de D. Ismael, apreciaba en todas ellas una mejoría considerable de los síntomas, en la primera recuperé un 90% de mi movilidad y de mi bien estar, después se agravó un poco estabilizándose y mejorando totalmente a lo largo de unos dos meses, total 4 visitas, después he ido a visitas de control y hasta el día de hoy he de decir que no tengo problemas.

Mientras me estaba tratando el problema cervical le comenté si me podía tratar el problema que tenía en el estómago, se trataba de calambres y pesadez en el estómago que me incapacitan para realizar cualquier actividad, esto venía a raíz según pudimos averiguar entre D. Ismael y yo a raíz de haberme tomado unos anticonceptivos, y (la verdad es que fue desde entonces), yo nunca había tenido problemas gástricos.

Lo alucinante fue que D. Ismael me dijo que teníamos que hacer una isoterapia del medicamento que me había causado el problema, según me explicó se trataba de más o menos una vacuna que haría que elimináramos toda la mala información que se había quedado en mi organismo, de tal forma que con ello mejoraría mi estado.

Pues bien, seguí los consejos de D. Ismael y hoy es el día no tengo absolutamente nada de nada que tenga que ver con el estómago o las digestiones lentas, vamos que me encuentro como se podría decir “como un reloj suizo”.

Muchas gracias Ismael